Se dice que la noche de año nuevo es mágica, ella trae consigo no sólo la llegada de un nuevo año, sino que también nuevas energías y renovaciones.

El 31 de diciembre en la noche, luego de la cena, viene la preparación para esperar las 00.00 horas, los campanazos de media noche se celebran con champagne, y algunas personas  tienen una serie de rituales para traer nuevas energías el año que viene, entre ellas están las siguientes:

-Comer 12 uvas: Para tener un año dulce, se comen pacientemente y sin interrupción 12 uvas, una por cada campanada que anuncia el cambio de calendario.

-Subir y bajar escaleras con una maleta: Para cumplir el sueño de viajar, se debe subir y bajar 3 veces una escalera, o subirse a una silla, (con maleta en mano) a las 00.00 y dar tres vueltas en la silla

– Vestirse de blanco: Para absorber las buenas energías, ya que el blanco es el color de la pureza y la renovación. El blanco en sí, no es un color, sino una luz compuesta por la suma de todos los colores, por lo tanto, es capaz de atraer nuevas energías.

-Encender velas: Para agradecer y pedir. Se prenden velas, no sólo para crear un ambiente especial, sino que también para pedir y honrar la buena fortuna, de este modo las velas amarillas activan la abundancia, las rojas el amor, las verdes la buena salud, las blancas la claridad mental.

Personalmente siempre hago la cábala de la maleta para viajar el año que viene, y me ha resultado, ya que las dos veces que la hice viaje a Costa Rica, al despedir el año 2015 también la realicé y salió el viaje a El Salvador. Y ustedes ¿Cuál es su cábala preferida?